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Concurrencia de retrasos. Resumen Post #1
En el post anterior veíamos que el concepto de concurrencia llevaba, desde el punto de vista legal, a un terreno abonado a la controversia derivado de las distintas interpretaciones que las distintas jurisdicciones podían dar en función del enfoque que adoptasen en ausencia de indicaciones contractuales.
Concurrencia de retrasos. Concepto técnico
Pero en la antesala del ámbito arbitral o judicial, en el proceso previo de la justificación de la existencia de la concurrencia, también se genera controversia de índole técnico, derivado del distinto enfoque que el analista puede adoptar.
Para centrar el asunto, más allá de las múltiples definiciones de concurrencia que pueden encontrarse, entre ellas las de la AACE y la SCL, existe consenso en que para que dos retrasos se consideren concurrentes han de cumplir:
- Deben tener un impacto crítico en la finalización del proyecto, y no simplemente absorber holgura;
- Deben ser independientes y no causados indirectamente por el retraso de las otras partes; uno de ellos puede ser debido a fuerza mayor;
- Ninguno de los retrasos identificados puede ser un retraso voluntario;
- La fecha de finalización del proyecto se habría retrasado en ausencia de cualquiera de los retrasos;
- El trabajo retrasado tiene que ser sustancial (es decir, no fácilmente corregible).
Concurrencia de retrasos. Factores técnicos
A partir de ahí, los factores que pueden influir en la identificación y cuantificación del retraso concurrente son los siguientes:
- Si la concurrencia se determina literal o funcionalmente; en este caso estaremos ante la disyuntiva de considerar si existe concurrencia cuando los retrasos se desarrollan exactamente en las mismas fechas, o por el contrario, se consideran concurrentes retrasos desarrollados en el mismo periodo de análisis, sin la necesidad de que las fechas de las actividades concurrentes sea exacta.
- Si la concurrencia se determina sobre la causa o el efecto del retraso; es decir, si la referencia para determinar concurrencia se establece en el evento en el origen del retraso («driver» no necesariamente expreso en el schedule) o en las actividades que dichas causas impactan y por tanto se muestran retrasadas (habitualmente expresas en el schedule). De forma indirecta se relaciona con la implementación de un método de análisis «observacional» (en el que la identificación del retraso se hace a través de la actividad retrasada en el schedule) o «modelado» (en el que se identifican las causas que potencialmente pueden generar retrasos).
- La frecuencia, duración y ubicación del intervalo de análisis; los intervalos de análisis son las ventanas temporales que se definen para realizar el análisis;la frecuencia hace referencia al número de ventanas en el que se divide la totalidad del proyecto; duración es el número de días que comprende cada una de esas ventanas. La práctica habitual es optar, bien por definir los intervalos de análisis haciéndolos coincidir con los intervalos de actualización del schedule, o bien, hacerlos coincidir con eventos relevantes del proyecto, tales como hitos del proyecto, revisiones del schedule debido a cambios, etc.; según se haya optado por el enfoque «literal» o «funcional» la elección del intervalo de análisis puede ser determinante, sobre todo en el caso de la teoría funcional, bajo la cual podría darse el caso de que, retrasos que de haber «caído» en el mismo intervalo de análisis hubieran podido ser considerados concurrentes, dejarían de serlo por contenerse en intervalos diferentes.
- El orden de inserción o extracción del fragnet en una implementación «stepped»; en las metodologías «modeled» el orden de inserción o extracción puede implementarse de modo «global» o «stepped», en este último caso la identificación de potenciales retrasos concurrentes puede verse afectada de acuerdo con dicho orden.
- Si el análisis se realiza utilizando una perspectiva «hindsight» o «blindsight»; la adopción de uno u otro enfoque puede influir en la identificación de concurrencia. Los defensores del «hindsight» defienden el no obviar toda la información disponible a la hora de realizar el análisis, mientras que los defensores del «blindsight» postulan el valor de recrear el conocimiento y la percepción del equipo gestor de proyecto para la toma de decisiones en el momento del impacto.
Concurrencia de retrasos. Posición del analista
El analista deberá de posicionarse para cada análisis ante las opciones de cada uno de esos factores, fundamentalmente dependiendo de la jurisdicción donde se dirima la controversia y fase del proceso de disputa, sin que a priori, ningún posicionamiento sea más correcto que otro.
Previo a todo ello, en el caso de que la evaluación de concurrencia se anticipe necesaria, el analista habrá optado por alguno de los métodos que permitan dicha evaluación, puesto que de forma directa no todos los métodos de análisis forense posibilitan cuantificar los retrasos y a la vez la concurrencia.