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El Contrato
Es usual que abogados, analistas de retrasos y planificadores, nos relacionemos colaborando a la hora de dar forma a los casos en contextos de disputas de tiempo y/o costes.
Sin embargo, la relación, de forma indirecta, comienza mucho antes, liderada por los abogados a través de su intervención en la elaboración/negociación de los contratos en los que se han de regular los aspectos relativos a la planificación del proyecto y los mecanismos de resolución de disputas relativas al plazo.
Un planificador ha de conocer y seguir, en aquello que le afecta, el contrato del proyecto que planifica; al igual que un analista de retrasos.
De la misma forma, aquellos abogados vinculados al sector de la construcción e ingeniería han de conocer conceptos básicos sobre planificación CPM, por ser la metodología habitual utilizada en construcción e ingeniería y cuando menos, las fortalezas y debilidades de los distintos métodos de análisis de retrasos, así como los conceptos clave relacionados con la disciplina.
No se puede juzgar el riesgo que supone para tu cliente el cómo se definan estos conceptos en un contrato, si no se tiene un criterio mínimo al respecto.
Desgraciadamente, en la práctica, eso es lo que se aprecia en muchas ocasiones, falta de criterio a la hora de confeccionar/negociar los contratos, que se plasma a través de indicaciones confusas, contradictorias o desequilibradas al respecto de estas materias o directamente su omisión.
En caso de disputa, mi experiencia es que esto va siempre en perjuicio de ambas partes.
Y si bien es cierto que es algo que queda solventado de recurrirse a regular la relación a través de contratos estándar (NEC, FIDIC…), donde está garantizado que estos aspectos son abordados y regulados, esto no libera a los departamentos jurídicos de tener criterio sobre conceptos de planificación y análisis de retrasos, pues no es exactamente igual el enfoque con que cada uno de estos estándares los abordan y además, dicho enfoque evoluciona con las diferentes actualizaciones o revisiones que reciben.
Mientras no haya disputa, no pasa nada…; pero si la hay, son asuntos que pasan a tomar importancia y donde suele haber mucho en juego.
Mejor tenerlos controlados o cuando menos, conscientemente descontrolados.
El Contrato y la Planificación
En base a mi experiencia, las cuestiones que, dependiendo de la dimensión del proyecto y tipo de contrato, afectando a la planificación, debían de estar descritas en los contratos serían:
- Requerimiento expreso de la metodología de planificación a desarrollar.
- Software a utilizar. Set-up y configuración.
- Requerimientos relativos al mantenimiento o no de reuniones periódicas específicas de planificación. Cadencia. Contenido.
- Requisitos de la planificación para apoyo de la producción.
- Requisitos de la planificación para evaluación del progreso.
- Requisitos relativos a la Línea Base. Plazos de presentación. Criterios de aprobación/aceptación.
- Requisitos relativos a los seguimientos. Cadencia. Contenido de los reportes. Criterios de aprobación/aceptación.
- Requisitos relativo al As-Built schedule. Criterios de aprobación/aceptación.
- Cualificaciones mínimas del planificador.
En Línea-Base podemos ayudar en los aspectos técnicos que desarrollan estos puntos de forma que se asegure, adecuado al proyecto en cuestión, que aquello que se espera de la actividad de planificación aporte valor y en caso de disputa, el material generado reúna los requisitos para servir de soporte del caso de reclamación.
El Contrato y el Análisis de Retrasos
En base a mi experiencia, las cuestiones que, afectando al análisis de retrasos debían de estar descritas en todo contrato a los efectos del manejo de potenciales disputas, serían:
- Mecanismos para resolución de disputas relativas al plazo derivados de cambios, eventos de fuerza mayor o cambios de ley y eventos meteorológicos.
- Requerimientos expreso de análisis prospectivo o retrospectivo en cada caso.
- Requerimiento expreso de la metodología de análisis de retrasos a desarrollar en cada caso y guía reconocida por la industria (AACE, SCL) en base a la cual se desarrollaría.
- Plazos de notificación de eventos.
- Régimen de penalizaciones.
- Clasificación de retrasos.
- Criterios de compensabilidad de retrasos.
- Teoría a adoptar para la evaluación de retrasos concurrentes.
- Tratamiento de situaciones de Pacing. Requerimientos de notificación. Criterios de compensabilidad.
En Línea-Base podemos ayudar en los aspectos técnicos que desarrollan estos puntos, de forma que se asegure, en caso de disputa, que las cuestiones relativas a la disciplina de análisis de retrasos no se van a constituir como el eje del caso y son las adecuadas al contexto del proyecto.
El Contrato, definiciones relativas a Planificación y Análisis de retrasos
Las cuestiones anteriormente referenciadas, relativas a planificación y análisis de retrasos, han de estar soportadas o complementadas por una serie de definiciones:
- Calendarios del Proyecto. Día laborable.
- Hitos administrativos a monitorizar.
- Hitos penalizables, intermedios o finales.
- Restricciones, faseados que afecten a la planificación.
- Periodos de revisión de las cuestiones sometidas a aprobación o revisión por parte del cliente.
- Qué se considera actividad crítica.
- Qué se considera camino crítico.
- Holgura del Proyecto. Propiedad de la holgura.
- Eventos meteorológicos adversos. Umbrales.
- Consideración de día perdido por evento meteorológico adverso.
Si no se tiene claro el por qué estas cuestiones son importantes, o si no se tiene claro cuáles son las implicaciones de cómo se definan estas cuestiones, difícilmente se podrán tomar las mejores decisiones que redunden en aquello que más conviene a quien se representa.
En Línea-Base podemos ayudar en los aspectos técnicos que desarrollan estas definiciones, de forma que se asegure que se asumen o se trasladan los riesgos que realmente se quieren asumir.
